San Antonio, un santo egipcio que, aun joven, a los veinte años, se tomó en serio aquellas palabras que Jesús había dirigido a otro joven: “si quieres ser perfecto, vende todo lo que tienes y sígueme”. Antonio se fue al desierto y quiso vivir solo, como ermitaño. Pero fueron tantos los cristianos que se sintieron atraídos por su ejemplo y fueron a vivir como él, que pronto el desierto se llenó de monasterios, los primeros en la historia cristiana. Y a Antonio le llamaron “Padre” (es lo que significa “Abad”).
Hecho a mano en Grecia
Medidas 11x14cm
Técnica: Impresión sobre lienzo
Material: Madera recubierta con cera de abeja natural
Cada icono lleva certificado de autenticidad
share
Partilhar
Esta sección actualmente no incluye ningún contenido. Añade un contenido a esta sección utilizando la barra lateral.